“Si bien la estrategia, el posicionamiento en el mercado y dar con un plan a largo plazo es muy importante, hay que centrarse en la creación de clientes satisfechos”, recomienda Tej Kohli, líder de negocios de software.

“Está bien para celebrar el éxito, pero es más importante prestar atención a las lecciones del fracaso”. Esas son las sabias palabras de Bill Gates, que aprendió temprano que las celebraciones son divertidas, pero las duras lecciones deben ser revisadas ??cuidadosamente.

“La fórmula del éxito: levantarse temprano, trabajar duro”. Este es el consejo de J. Paul Getty, que tomó el enfoque tradicional para crear un negocio exitoso. En una era en la que todo el mundo quiere encontrar atajos y hacerse rico rápidamente, esto sirve como un buen recordatorio.

“No creas que eres imparable o infalible. No creas que la única forma en que su negocio va a funcionar es a través de la perfección. No aspires a la perfección, sinoal éxito”. El brasileño Eike Batista encontró que él se ponía nervioso cuando las cosas no le salían en forma perfecta, pero nunca lo hará. En su lugar, mirar el éxito y no la perfección era su llave.

“Que se diviertan. El juego es mucho más agradable cuando usted está tratando de hacer algo más que dinero”, dice Tony Hsieh, fundador de Zappos,que se apresura a señalar que cuando dejas de hacer lo que te gusta, de repente no hay cantidad de dinero vale la pena. Hay más en hacerse rico que ganar dinero y si lo haces bien, el dinero es sólo un beneficio.

“Si usted quiere tener éxito, debe actuar por nuevos caminos, en lugar de recorrer los caminos gastados de éxito conocido”. John D. Rockefeller personificó el espíritu de empresa, pero es algo que se está volviendo una rareza. En lugar de ir por la ruta segura, probar algo nuevo. Usted puede llevarse una sorpresa.

“El mayor riesgo está en tomar ningún riesgo. En un mundo que está cambiando muy rápidamente, la única estrategia que está garantizada para fallar reside en no tomar riesgos”. Sabias palabras de Mark Zuckerberg que, sin duda, vale la pena seguir. Sin riesgo, no hay recompensa. Si usted no hace un salto de vez en cuando, usted no será excepcional.

“Tiene que haber un equilibrio en la vida. Un balance entre los negocios, la familia y la oportunidad de aprender y enseñar”. Las palabras de Chuck Feeney se alinean con este hecho: sin equilibrio, todo se desmorona.

Por Infobae